Se realizó la segunda jornada de las audiencias públicas por el proyecto de ley de radiodifusión. Primaron las críticas de las entidades. Adepa señaló que la propuesta del Gobierno favorece "al debilitamiento deliberado de los medios privados". ARPA también apuntó contra la iniciativa.
Luego un arranque exclusivo de oradores oficialistas, la segunda jornada de audiencias públicas en Diputados escuchó duras críticas al proyecto oficial para una nueva ley de Radiodifusión, cuestionado por su "intervencionismo excesivo".
Si bien volvieron a predominar las exposiciones a favor de la norma del Poder Ejecutivo, aparecieron las voces disonantes en el auditorio de la Cámara baja. Por la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), su secretario de relaciones Luis Tarsitano, subrayó que la norma oficial contiene un "excesivo intervencionismo".
El representante de la entidad señaló que la propuesta del Gobierno favorece "al debilitamiento deliberado de los medios privados".
"Esta ley, excesivamente intervencionista, no respeta la diversidad de los licenciatarios legales que brindan un servicio", se quejó Tarsitano, y cuestionó "la discrecionalidad de la autoridad de aplicación" y "el peligro real de la falta de controles".
A la vez, sostuvo que la propuesta oficial "no parece apuntar a un desarrollo amplio y sustentable, por el contrario, parece desmembrar ese concepto".
"ADEPA acompañará las nuevas voces, pero nunca el debilitamiento deliberado del espacio correspondiente a los medios privados, para que terminen dependiendo de recursos oficiales. Se ha dicho que esta ley no afecta a diarios y revistas, pero esto no es así", agregó.
Por su parte, el titular de la Asociación de Radiodifusoras Privadas Argentinas (ARPA), Carlos Molina, también apuntó contra la iniciativa, y afirmó que "restringe la libertad de expresión" y provoca "daños patrimoniales" a las empresas.
El presidente de la entidad respaldó la iniciativa de la oposición sobre "la realización de audiencias en todo el país, con el debido tiempo de aviso", y se quejó porque el proyecto oficial "busca restringir la libre circulación de la prensa escrita y las radios".
"Esta ley restringe la libertad de expresión, pone limitaciones en los cambios de la programación, en los artículos 53 y 42", señaló Molina.
"Se instalan mecanismo de censura previa. El Estado sólo necesita promocionar sus actos, no necesita un espectro ilimitado de radiodifusión. La libre expresión es para los ciudadanos", enfatizó el titular de ARPA, y dijo que el proyecto también "desconoce los derechos adquiridos y provoca serios daños patrimoniales" a las empresas.
El constitucionalista Félix Loñ también participó de la audiencia, y respaldó el proyecto de la diputada Giudici, aunque evitó cuestionar directamente a la iniciativa de Cristina Kirchner.
"Me permito una recomendación: que se busque el consenso y el diálogo. Consensuar es que se conceda algo, eso es una cuestión clara", añadió el abogado.
De todas formas, en la segunda jornada de audiencias predominaron las expresiones a favor de la ley oficial de Servicios de Comunicación Audiovisual, como la del premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, en el cierre de la segunda etapa.