Streambe, especializada en transformación digital e inteligencia artificial, ya opera en cinco países, emplea a más de 200 profesionales y destina el 20% de su presupuesto a innovación. A 15 años de su creación, proyecta una nueva etapa de expansión global.
Con una facturación anual de 10 millones de dólares, un crecimiento sostenido del 35% y más de 200 puestos de trabajo generados,
Streambe se consolida como un actor clave en el ecosistema tecnológico argentino. Desde sus oficinas en Argentina, España, México, Uruguay y Estados Unidos, brinda soluciones de transformación digital a empresas de múltiples industrias, y destina el 20% de su presupuesto a innovación, capacitación y desarrollo de prototipos.
La compañía mantiene un crecimiento anual del 35% y un resultado neto promedio de 27%. En los últimos años, incorporó herramientas de inteligencia artificial que permiten a sus clientes optimizar tiempos y reducir costos hasta en un 25%.
Con una visión global desde el nacimiento de la empresa, en 2009 los fundadores decidieron formalizar la sociedad.
"Teníamos trabajos corporativos con buen sueldo, pero sentíamos que podíamos dar más. No queríamos tener un techo", recordó
Fabián Perfetti, director y cofundador de Streambe. Durante los primeros años, la rutina era agotadora: jornadas laborales completas en sus empleos formales y, después de las 18, más horas de desarrollo para el proyecto propio, incluyendo fines de semana y feriados.
Pronto llegó el gran hito: la mayor petrolera del país confió en los jóvenes emprendedores, y, en apenas un año, Streambe pasó de cero a 20 empleados, con oficinas propias. Ese aprendizaje clave llegó cuando la compañía dejó de ser cliente, lo que les permitió comprender el valor de diversificar:
"Aprendimos que siempre es mejor tener un millón de clientes de un peso que uno solo de un millón", señaló
Gastón Gugliotta, Gerente General y Co - fundador de Streambe.
Aceptando los desafíos y con la mirada de ampliar su portfolio, los emprendedores diversificaron su cartera, participaron en eventos corporativos por todo el país y comenzaron a atraer nuevos nombres de peso. Con la incorporación de clientes como Roemmers, SKF, Innovamed, Santander Río, Grupo Petersen, entre otros la empresa logró escalar internacionalmente sin perder su esencia.
El crecimiento de Streambe fue sostenido y planificado a lo largo de su historia. En 2024, la firma alcanzó una facturación de u$s 10 millones, con un equipo de aproximadamente 200 empleados. El pensamiento emprendedor, pero corporativo de los socios fue diferencial en este contexto: "
Nunca nos vimos como una pyme. Desde el primer día actuamos como una corporación", remarcó Perfetti. Esa visión, aseguró, les permitió mantener la cultura organizacional aún cuando el equipo creció y el negocio se expandió fuera del país.
La internacionalización llegó de la mano de su filosofía fundacional de salir a buscar oportunidades "fuera de la caja". Actualmente, el 35% de su facturación proviene del exterior y, actualmente, la empresa está focalizada en integrar sus operaciones para que todas sus oficinas trabajen bajo un mismo objetivo global, con procesos financieros y comerciales coordinados.
Hoy, a 15 años de aquel primer proyecto universitario, la compañía proyecta continuar su crecimiento en la Argentina y el exterior, con foco en transformación digital e inteligencia artificial aplicada a negocios, sin perder su filosofía del emprendimiento. "
Mantener la cultura fue siempre el gran desafío. "Aunque hoy somos globales, la esencia debe seguir siendo la misma", cerró Gugliotta.