Volvo Trucks y Buses Argentina fue reconocida oficialmente por la Aduana Argentina como Operador Económico Autorizado (OEA) en su categoría de "Cumplimiento", un estatus que la posiciona como una de las pocas empresas del sector automotriz y del transporte pesado que alcanzaron esta validación en el país.
El proceso de certificación, que demandó entre seis meses y un año, requirió la articulación de distintas áreas clave de la compañía, entre ellas Finanzas, Legal, Impuestos, Tesorería y Logística.
La figura del Operador Económico Autorizado (OEA) fue creada por la Organización Mundial de Aduanas (OMA) en el marco del programa SAFE, (Framework of Standards to Secure and Facilitate Global Trade) una iniciativa internacional lanzada en 2005 para fortalecer la seguridad de la cadena logística global sin obstaculizar el comercio legítimo. Este marco promueve la cooperación entre aduanas y empresas mediante estándares comunes de cumplimiento, trazabilidad y gestión de riesgos. Actualmente, la OMA representa a 186 administraciones aduaneras que, en conjunto, procesan aproximadamente el 98?% del comercio mundial.
Un reconocimiento que valida procesos y consolida confianza
"Esta certificación significa que la compañía fue evaluada como un operador confiable dentro del comercio exterior, en cumplimiento con los requisitos fiscales, comerciales y documentales exigidos por ARCA", explicó
Diego D'Ardis, responsable de Logística & Importación de Volvo Trucks & Buses Argentina. Según detallo, el impacto se traduce en una mejora sustancial de la eficiencia operativa, mayor previsibilidad en los procesos aduaneros y una consolidación de la empresa como socio estratégico en la cadena logística global.
El proceso de certificación, que demandó entre seis meses y un año, requirió la articulación de distintas áreas clave de la compañía, entre ellas Finanzas, Legal, Impuestos, Tesorería y Logística.
"Se presentó una solicitud formal con carácter de declaración jurada y documentación respaldatoria como estatutos societarios, estados contables certificados y notas explicativas con detalles financieros", enumeró
Natalia Pandolfelli, responsable de Comex de Volvo Trucks & Buses Argentina.
Entre los beneficios operativos inmediatos que implica para Volvo haber alcanzado esta categoría, D´Ardis destacó la prioridad en pasos fronterizos y turnos aduaneros, el acceso a iniciativas específicas promovidas por la Aduana, y una mayor facilidad para integrarse en acuerdos de reconocimiento mutuo (ARM) con otros países. "El reconocimiento como socio confiable ante organismos nacionales e internacionales mejora no solo nuestros procesos, sino también el servicio que ofrecemos a nuestros clientes y proveedores", señaló D´ardis.
Un estándar que se expande en América Latina y el mundo
En la región, la figura del Operador Económico Autorizado adquirió creciente relevancia como mecanismo para fortalecer la cooperación entre aduanas y empresas, y para elevar los estándares de cumplimiento en la cadena logística. En América Latina y el Caribe, el OEA no solo se implementa como una herramienta de facilitación del comercio, sino también como un instrumento de confianza mutua entre el sector público y privado.
Varios países de América Latina y el Caribe —entre ellos México, Colombia, Brasil, Perú, Uruguay y Chile— desarrollaron programas nacionales de OEA que hoy reúnen a cientos de operadores certificados. Estos avances consolidaron al OEA como un estándar regional clave para la competitividad
A nivel global, en tanto, cuentan con programas de operadores económicos autorizados los 27 países de la Unión Europea (OEA), Estados Unidos (C-TPAT), Canadá (PIP), China, Japón, Nueva Zelanda, República de Corea y Singapur.
Proyección regional y estrategia global de Volvo
Volvo Argentina ya se encuentra trabajando en la siguiente etapa del programa, conocida como OEA Simplificación, que exige mayores estándares operativos y financieros. Más adelante, planea avanzar hacia la categoría OEA Seguridad, que implica implementar estándares de control físico, documental y de procesos. "
El objetivo es lograr una optimización y automatización completa del flujo aduanero. Aunque puede variar, estimamos un plazo de entre uno y dos años por etapa", agregó D ´ardis.
"El impacto también se traslada al cliente final, especialmente en un rubro como el de los camiones y buses, donde los tiempos logísticos y la previsibilidad en el abastecimiento de partes y unidades resultan críticos.
La certificación nos permite mayor agilidad en la entrega de unidades o partes importadas, reducción de costos logísticos por menor intervención aduanera y mejor servicio postventa, al haber mayor previsibilidad en el abastecimiento", sostuvo el directivo.
Aunque la certificación OEA obtenida por la filial argentina representa un hito local, se enmarca en una estrategia global del Grupo Volvo orientada a fortalecer la trazabilidad y la seguridad en sus operaciones logísticas internacionales.
En Argentina, la por entonces AFIP (hoy ARCA) relanzó su programa en 2018 y desde entonces certificó un número limitado de empresas, mayormente en sectores vinculados a la industria farmacéutica, alimentaria y tecnológica. En el rubro automotriz y del transporte pesado, son pocas las compañías que alcanzaron el estatus OEA en cualquiera de sus tres categorías, lo que subraya el valor estratégico del logro alcanzado por Volvo. "Volvo se encuentra entre los pioneros del rubro en obtenerla", confirmó Pandolfelli.
En un contexto internacional cada vez más exigente en términos de trazabilidad, seguridad y cumplimiento, el avance de Volvo Trucks y Buses Argentina hacia un comercio exterior más ágil y transparente parece encaminarse no solo como una buena noticia para la compañía, sino también como una señal de transformación para todo el sector.