El presidente Javier Milei estuvo reunido con más de 30 empresarios e inversores ligados a la inteligencia artificial. Argentina cuenta con condiciones ideales para cumplir el deseo del mandatario de "hacer un polo de inteligencia artificial en la Argentina". Escribe Juan Santiago, CEO de Santex.
Por Juan Santiago, CEO de Santex y miembro del Board de la Liga del Bien de Inteligencia Artificial
El Presidente
Javier Milei hizo una gira por la ciudad estadounidense de San Francisco, probablemente el hub de empresas tecnológicas más importantes del mundo. Estuvo reunido con más de 30 empresarios e inversores ligados a la inteligencia artificial, entre los que se destacan
Mark Zuckerberg (CEO y Fundador de Meta),
Sundar Pichai (CEO de Google),
Sam Altman (CEO de Open AI) y
Timothy Cook (director ejecutivo de Apple).
Si bien parece una agenda bastante ambiciosa para cualquier país, Argentina cuenta con condiciones ideales para cumplir el deseo del mandatario de "hacer un polo de inteligencia artificial en la Argentina". Entre ellas podemos destacar:
-
El perfil que se busca de los países exportadores: Las empresas importadoras no solo buscan contratar servicios a otros países que presentan condiciones económicas convenientes, sino también ubicar estos servicios en mercados cercanos o bien con horarios y cultura similares; para favorecer el flujo del trabajo e incrementar la productividad en los negocios. Nuestra masa crítica de especialistas informáticos que tienen buen dominio del idioma inglés, es algo que se descuenta en las conversaciones. Pero el diferencial en cada reunión o encuentro que tengo con empresarios y dirigentes en todo el mundo, es nuestra capacidad de adaptación y asumir riesgos de co creación para buscar siempre mejores respuestas y oportunidades.
-
Condiciones geo comerciales: El contexto de las relaciones comerciales entre los países importadores y exportadores de dichos servicios es crucial. Actualmente Argentina se ve beneficiada por dos situaciones: el aumento de los aranceles de EE. UU. a productos clave de China para contrarrestar el rápido avance tecnológico del gigante asiático, por un lado; y por otro, la apertura económica de Argentina, con especial interés en el país norteamericano y en la industria tecnológica.
-
Capacidad de las empresas argentinas: Más allá de las condiciones exógenas, también es importante que los países exportadores estén a la altura de la calidad que demandan los importadores. Argentina, en ese sentido, es mundialmente reconocida por su capacidad de creación de empresas y formación de recursos de base tecnológica.
-
Acceso a los datos: Las fuentes de datos de las que se alimentan las empresas de IA generativa también son un factor determinante del potencial de estas corporaciones. Y Argentina posee la computadora de datos de uso abierto más grande de Latinoamérica: Serafín posee una capacidad de procesamiento de 156 Teraflops y pertenece al Centro de Cómputo de Alto Desempeño de la Universidad Nacional de Córdoba.
-
Regulación: Efectivamente es una oportunidad el hecho de que Argentina no posea aún un marco normativo específico que regule el campo de la inteligencia artificial, algo que ocurre en muy pocos lugares del mundo aún, como es el caso de la Unión Europea. En este sentido, todo va a depender de cómo nuestra ley local se alinee a la de los potenciales importadores de nuestros servicios. Desde la Liga del Bien de IA, buscamos aportar nuestro conocimiento específico para fomentar que esto pase y que lo haga en la dirección más ética responsable; haciendo públicos los dilemas que estos avances plantean y sugiriendo soluciones y procedimientos para su adecuación. En particular, entendemos que, a diferencia de otros saltos tecnológicos de la historia, una regulación centrada en lo humano no es necesariamente incompatible con la innovación.
Hoy, la Inteligencia Artificial es la industria de mayor potencial a nivel mundial y Argentina tiene las herramientas y el viento a favor para poder convertirse en uno de los hubs más importantes del planeta en este campo. Ojalá podamos capitalizarlo, ya que es una oportunidad para volver a ser una potencia mundial.