Señalaron directivos de la publicación que aspiran ampliar su ámbito de difusión entre los investigadores y profesionales y extender sus descubrimientos a un público más general. Este año fue premiada con el Premio Príncipe de Asturias por "acercar la ciencia a la vida".
La revista "Nature" aspira a ampliar su ámbito de difusión entre los investigadores y estudiosos profesionales y extender sus descubrimientos a un público más generalista de forma comprensible porque "hasta el común de los mortales necesita comprender los mensajes de la ciencia".
Así lo expresó en Oviedo el editor jefe de la revista, Philip Campbell, junto a la consejera delegada del grupo Macmillan, Annette Thomas, quienes recogieron el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2007, compartido con una de sus principales competidoras, la revista estadounidense "Science".
Para Campbell, una parte "muy importante" de la misión de "Nature" desde su fundación en 1869 ha sido "publicar ciencia para científicos" y para un público más generalista que necesita comprenderla en cuestiones que le afectan "como cuando un familiar sufre una determinada enfermedad".
Para la consejera delegada de MacMillan, editora de "Nature", en los últimos años este grupo viene buscando "fórmulas innovadoras para llevar el conocimiento científico a un nuevo contexto", lo que les ha llevado a implantar programas para transmitir esta información en formatos digitales a universitarios de todo el mundo.
Según el editor jefe de la revista, el traslado de la información de este tipo de publicaciones a los medios de comunicación generalistas tiene unos resultados "sorprendentes" por el interés que muestra el público ante este tipo de cuestiones.
"Si el periodismo toma en serio a su público, éste le responde y el debate social alcanza un gran nivel", según Campbell, quien puso como requisito para esta circunstancia que los medios "den tiempo al periodista para que haga su trabajo bien" y que éste evite introducir opiniones "que distorsionen la información".
Los responsables de "Nature", subrayaron que el "criterio principal" para decidir o no la publicación de uno de los 900 artículos que editan cada año, tras rechazar el 90 por ciento de los originales, es que su contenido tenga "un impacto profundo y amplio" en el ámbito que aborde.
En cuanto a su relación con la revista estadounidense "Science", señalaron que "colaboran" en exigir ciertas normas de comportamiento a los científicos para publicar y se "complementan", pero fundamentalmente "compiten" para mejorar su nivel de calidad y para que ninguna de las dos "se duerma en los laureles".
Ambas revistas obtuvieron el galardón de Comunicación y Humanidades 2007 por "acercar la ciencia a la vida" y difundir con rigor y claridad las teorías y conocimientos más elevados.