Se trata de una campaña integral de reposicionamiento y rebranding, acompañada de un plan digital de medios y brand ambassadors. Manifiesto fue la responsable de llevar a cabo todo el proceso desde cero para presentar una marca renovada y alineada.
La caída del cabello preocupa cada vez más y, aunque se cuide, no siempre depende de uno mismo cómo luce el pelo, porque hay muchas causas que pueden llevar a su pérdida como la alimentación, el estrés o la contaminación.
Y el cabello es algo que dice mucho de las personas. Su pérdida o deterioro no solo afecta la imagen, también puede afectar la confianza. Por eso nació VR6, una marca de productos anticaída que ayuda con el cuidado y la recuperación del pelo, pero que tiene como objetivo algo más importante: recuperar mucho más que el cabello. Con una fórmula única y patentada.
Para conseguir el objetivo,
VR6 creo una campaña que conectará directamente con quienes dicen “no” a un plan, por no sentirse con confianza. Muestra algunas de las situaciones cotidianas en las que el pelo condiciona de forma negativa.
Y así es cómo
Manifiesto trabajó el rebranding total de la marca. Construyendo una marca Premium, pero cercana y con un diseño fresco que conectara con el target. Para actualizar la imagen de marca y acercarse al público con una imagen más moderna, hicieron un shooting estilo beauty. Elegieron tres modelos con perfiles muy diferentes, pero con algo en común: la naturalidad.
Creo un set minimalista utilizando el color premium de la marca para transmitir la simpleza que buscában. Y finalmente, lanzaron dos spots utilizando el claim
“Que tu pelo no te eche para atrás”, para comunicar que estan al lado de quienes sufren la pérdida o deterioro del cabello.
En total la campaña se compone de 2 spots, piezas para redes sociales y medios digitales y gráficas para punto de venta.
En palabras de Norman Pons, Head of Studio y responsable del proceso de rebranding: “
En cuanto a la imagen y logo, el rebranding de VR6 representa una transformación integral de la marca, marcando un giro estratégico de 360º respecto a su identidad anterior. La anterior imagen corporativa no estaba alineada con los valores esenciales de la marca ni conseguía establecer una conexión efectiva con el consumidor contemporáneo. Por ende, este rediseño total fue concebido con el objetivo primordial de optimizar la posición de la marca en el mercado y recuperar su notoriedad, además de explorar nuevas fronteras”.
Este proceso de rebranding se traduce en una imagen audaz y moderna que refleja la profunda renovación y el crecimiento de la marca. Se ha optado por elementos de diseño más elegantes, en consonancia con una estética sofisticada y contemporánea. Estos cambios buscan resaltar la evolución de la marca hacia un posicionamiento más premium.
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