Para el magnate de las comunicaciones la publicidad ya no puede soportar al contenido digital. Por ello, aseguró que los periódicos deben encontrar la fórmula para cobrar por las ediciones online. Algunos medios europeos comenzaron a arancelar ciertos contenidos y generan ganancias.
El consejero delegado de News Corporation, Rupert Murdoch, aseguró que los periódicos deben encontrar la fórmula para cobrar por las ediciones online además de confiarse en los ingresos por la publicidad y adelantó que su compañía está trabajando en un entorno móvil de lectura de prensa.
Murdoch dijo que la publicidad ya no puede soportar al contenido digital, que además merma las ventas de ejemplares impresos y apunto que la gente ésta acostumbrada a leer todo gratis en la red y que eso tiene que cambiar, según informó Brand Republic.
Para el dueño del mayor imperio mediático los medios ya no pueden aguantar más debido a que el modelo de negocio está colapsando y aseguró que otras opciones para reflotar el sector son invertir en dispositivos de lectura exclusivos para cada marca, como lo está haciendo News Corporation.
En Europa nace una tendencia que, parece, haber escuchado de antemano los consejos de Murdoch. La editorial alemana Axel Springer, dueña de Bild, el diario más grande de Europa, disfruta en 2009 de las mayores ganancias en sus 62 años de historia. En las oficinas de Springer en Berlín, no se han oído desesperadas conversaciones sobre cómo sobrevivir a la recesión y la revolución digital. En cambio, Mathias Döpfner, presidente de Springer, dijo que estaba buscando oportunidades de expansión mediante adquisiciones en Alemania, Europa oriental y quizá -por primera vez- los Estados Unidos.
En gran parte del mundo, los diarios estadounidenses son vistos como el patrón oro del periodismo. Pero su modelo de negocios parece haber fracasado. Si bien buena parte de Europa se enfrenta a los mismos problemas, algunos editores de diarios encontraron maneras innovadoras no sólo de sobrevivir sino también de prosperar frente a la recesión e Internet.
En Europa hay señales de vida periodística. Aunque en Alemania la publicidad bajó vertiginosamente, Springer pudo contrarrestar esa caída implementando, entre otras cosas, un aumento en el precio de su diario Bild, que vende 3 millones de ejemplares.
Es cierto que nadie encontró la panacea universal, o la 'bala de plata' para afrontar la recesión. Pero hay casos de éxito sugerente: en Schibsted, editorial que publica los diarios más importantes de Noruega, las actividades online producen aproximadamente un cuarto de los ingresos de la empresa y la mayor parte de sus ganancias. En Internet, la estrella es VG Nett, un sitio web asociado a Verdens Gang, un diario de formato tabloide de Nouega. VG Nett tiene un margen de ganancia de más del 30 por ciento y rivaliza con Google como sitio web más popular de ese país.
Al igual que la mayoría de los sitios web de diarios, VG Nett obtiene la parte crucial de sus ingresos de la publicidad, pero está empezando a recaudar dinero de los usuarios. Unas 150.000 personas pagan hasta 90 dólares por año a un club de dietas virtual para adelgazar. Hace poco VG Nett empezó a cobrar por partidos de fútbol transmitidos en vivo por streaming. Y una red social conectada con VG Nett cobra a los usuarios para actualizar sus perfiles. Pero el acceso a las noticias sigue siendo gratuito.
Springer genera el 14 por ciento de sus ingresos online, más que la mayoría de los diarios estadounidenses, aun cuando los mercados donde opera -fundamentalmente Alemania y Europa oriental- tienen menor desarrollo digital que los Estados Unidos. Uno de los motivos, dijo Döpfner, es que Springer se atrevió a competir consigo misma. En lugar de tratar de proteger las publicaciones existentes, adquirió o creó nuevas, algunas de las cuales distribuyen el mismo contenido a diferentes públicos.
Aunque en Alemania la publicidad bajó vertiginosamente, Springer pudo contrarrestar esa caída subiendo el precio de publicaciones como Bild, el diario que vende más de tres millones de ejemplares.
Fuente: Clarín y medios españoles