La Fórmula 1 se caracterizó por ser uno de los pocos deportes que mantiene los anunciantes en épocas de crisis. Pero esta vez la historia cambió. ING anunció que deja Renault y otras marcas lo imitarían.
La escudería Renault sufrió un duro golpe al conocer que ING, su patrocinador principal, dejará de invertir en la Fórmula 1 a fin de año, lo que podría poner en peligro incluso el futuro del equipo.
ING, una de las aseguradoras y bancos más importantes del mundo, anunció en un comunicado que no renovará su contrato de tres años con el equipo francés, que vence a fin de temporada.
"A la luz del programa de reducción de costos anunciado recientemente, ING confirmó que no renovará el contrato de tres años de patrocinio con Renault F1 y que terminará su presencia en la Fórmula 1 tras la temporada 2009", dijo la compañía.
La renuncia de ING se suma a la decisión del banco Crédit Suisse de no prolongar en 2010 su contrato con BMW, en el contexto de la "peor crisis" de la historia de la Fórmula 1, según el presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Max Mosley.
El equipo francés reaccionó al anuncio con una declaración de su jefe, el italiano Flavio Briatore, en la página oficial de internet de la escudería.
"Somos conscientes desde hace un tiempo de que la actual situación financiera mundial está exigiendo una reestructuración de nuestro deporte", dijo Briatore tras elogiar la colaboración hasta ahora con la entidad holandesa.
Para el italiano, las drásticas medidas de ahorro en la Fórmula 1 darán pronto sus frutos. "Con el programa de medidas en marcha, tenemos confianza en que podemos garantizar un sólido futuro para nuestro equipo y la Fórmula 1", concluyó.
La entidad bancaria y aseguradora reducirá ya este año un 40 por ciento de sus actividades de patrocinio, aunque la empresa no deja absolutamente claro si Briatore y Alonso, doble campeón mundial, tendrán que renunciar ya a casi la mitad del dinero de ING en 2009.
La compañía es también sponsor oficial de las carreras del Mundial en Australia, Bélgica, Hungría y Turquía.
"El compromiso de ING con la Fórmula 1 fue el primer proyecto global de patrocinio de la empresa", advirtió la empresa holandesa, que golpeada por la crisis financiera internacional, pretende implementar drásticas medidas como el recorte de 7.000 empleos y el ahorro de 1.000 millones de euros (1.280 millones de dólares) sólo en 2009.
El objetivo del gasto en patrocinio fue incrementar los ingresos y la visibilidad de la marca, sobre todo en los mercados principales. Y "en los últimos dos años ING cumplió ese objetivo con la sponsorización de la Fórmula 1", comunicó la empresa, que asegura que de marzo de 2007 a noviembre de 2008 el reconocimiento de su marca se incrementó un 16 por ciento.
Según un informe del año pasado de la revista "Formula Money", ING invirtió anualmente en Renault unos 65 millones de dólares de los 86 millones que dedicó a la máxima categoría del automovilismo.
"ING disfrutó de la relación con Renault F1 y continuará trabajando estrechamente con el equipo durante el último año de colaboración", concluyó la empresa.
Incluso aunque el jefe de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, repite una y otra vez que no teme por el futuro de la competición, las nubes negras no desaparecen.
Tras la retirada de Honda -y a seis semanas del comienzo del campeonato aún no se encontró un comprador para el equipo-, los patrocinadores individuales están abandonando los equipos.
Según medios de prensa, en Estados Unidos está formándose un equipo nuevo para 2010, pero para equipos como Renault podría ponerse cada vez más difícil, pese al ahorro sin precedentes en el que está embarcada la Fórmula 1, justificar ante el público el aún costoso compromiso con la competición.
El fabricante francés, de hecho, podría recibir 3.000 millones de euros (3.800 millones de dólares) de ayuda estatal para superar la crisis del sector.