El último estudio de Quiroga analizó si hay relación entre el clima y el encendido. Entre las conclusiones: hay correlación entre el crepúsculo vespertino y el encendido, es decir, cuanto más temprano oscurece más temprano los individuos encienden la TV.
La curva de encendido de la TV* muestra una diferencia importante entre el encendido durante el invierno y el verano. Durante los meses de invierno la TV presenta picos de encendido y nos preguntamos si había alguna relación con algún factor externo, es por eso que analizamos la correlación entre la curva de encendido y varios fenómenos (lluvias, temperaturas máximas, mínimas y medias, crepúsculo vespertino **).
Del análisis surge:
• No existe una correlación directa con la lluvia.
• Tampoco existe una correlación significativa con las temperaturas.
• Existe una fuerte correlación entre el crepúsculo vespertino y la curva de encendido, es decir, parecería que cuanto más temprano oscurece más temprano los individuos encienden la televisión.
Gráfico 1: Encendido de la TV de Lunes a Viernes y Crepúsculo vespertino. Fuentes: TVDATA 8 y Servicio Meteorológico Nacional.
Grafico 2: Encendido de la TV de sábado y domingo y Crepúsculo vespertino. Fuentes: TVDATA 8 y Servicio Meteorológico Nacional.
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En los gráficos 1 y 2 vemos una correlación entre el encendido total de la TV y el crepúsculo vespertino** de L a V y de Sábado y Domingo, respectivamente, desde enero de 2013 hasta julio de 2016. Como vemos los picos de encendido en general se producen en algún momento de junio, julio o agosto y el valor más bajo se da en enero o febrero (2015 fue un año especial ya que se presentaron las elecciones presidenciales, aunque se mantiene la misma tendencia).
Para fundamentar nuestra hipótesis de que la gente en invierno prende la TV más temprano, analizamos el encendido de la TV por bandas horarias. Consideramos tres bandas horarias del prime-time, es decir, las que contienen los horarios del crepúsculo vespertino y analizamos si existían diferencias de encendido entre ellas tomando en cuenta la época del año. Consideramos los intervalos 18-20hs, 20-22hs y 22-24hs y calculamos la diferencia que existía primero entre la misma banda en diferente época del año, y luego la diferencia que existía entre las 3 bandas durante la misma época.
Como se puede ver en la tabla 1, durante todos los años analizados, para una dada banda horaria el encendido siempre es mayor en los meses de invierno. Por otro lado, la diferencia en el encendido entre las banda de 18 a 20 y de 22 a 24 es muchísimo mayor durante los meses de verano que en los de invierno (lo mismo sucede con la diferencia de encendido entre la banda de 20 a 22 con la de 22 a 24).
Por último, en la tabla 3 se puede observar que el mayor crecimiento entre el periodo junio-julio y enero-febrero se da en la banda de 18/20Hs seguido de la banda de 20/22Hs, lo cual sugiere que en verano la gente prende la TV más tarde.
Es decir, de los fenómenos atmosféricos analizados, el único con una correlación significativa en relación al encendido de la TV es el crepúsculo vespertino. Y, si bien, correlación no implica causalidad, creemos que el dato es de por sí bastante interesante.